La diva del soul parece romper la estela de otras estrellas que fallecieron casi arruinadas pero luego sus familias amasaron una gran fortuna a base de explotar sus derechos de imagen. En este casoAmy ha demostrado tener un gran olfato en el mundo de los negocios ya que sus empresas han conseguido estar valoradas en más de tres millones de dólares.
A Winehouse no se le daban nada mal los negocios o por lo menos eso demuestran las dos empresas que ha dejado tras su repentina y misteriosa muerte el pasado 23 de julio.
Entre los bienes que ha dejado a los suyos, están sus propiedades, varias inversiones así como sus empresas: las gestorías Cherry Westfield y CW Touring.
Según recoge la web Contact Music, que cita los registros anuales publicados el pasado domingo, se ha conocido que Cherry Westfield valía más de 2 millones de euros a finales de noviembre de 2010 mientras que CW Touring obtuvo un valor de más de 9.000 euros.
Se desconoce si la familia ha decido ponerlas en venta. Parece que a pesar de que pueda parecer lo contrario, la cantante sabía mover su dinero e invertirlo para que diera jugosos beneficios.
En una de las últimas tasaciones de la fortuna de Amy, realizada a principios de año, se supo que ascendía a más de 17 millones de euros, cantidad que seguro que tras su muerte ha crecido de manera exponencial gracias al espectacular repunte en la venta de sus discos y nuevos recopilatorios.
Empieza el negocio de la leyenda.
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