Aunque fue capaz de dejarlo, el último James Bond reconoce que para él es un auténtico esfuerzo superar su adicción al tabaco. Y es que como muchos fumadores, el actor ha desarrollado una dependencia de la que le está siendo muy difícil salir. Todavía hoy se arrepiente de haber encendido su primer cigarrillo.
Superar el mal vicio de fumar es para muchos un suplicio que tardan muchos años en dejar atrás. En el caso de Daniel, a pesar de que no ha vuelto a engancharse, confiesa que "le encanta" el tabaco y que encuentra "muy difícil" superar la tentación de volver a las andadas.
La web Contact Music quiso saber por qué decidió despedirse del tabaco. El artista lo tiene claro: "Porque es estúpido, sin ánimo de ofender... Sí, me encanta, es estúpido y te acaba matando... Es un esfuerzo constante, siempre te dicen que eres un adicto y que nunca podrás dejar de ser un fumador.
Craig es consciente de su problema y advierte a quienes quieran probarlo, que se lo piensen muy bien antes de empezar porque "es algo horrible, una verdadera adicción, muy dura".
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